Un hogar de Rosario que cuente con el equipamiento para inyectar energía fotovoltaica al sistema integrado de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) puede generar un ahorro de hasta un 13 por ciento.
La provincia fue pionera en el país a la hora de permitir que los hogares residenciales sumen potencia a la red energética. Sin embargo, el programa todavía no tiene una buena cantidad de usuarios individuales adheridos por las condiciones que requiere.
En primer término, comprar el equipamiento necesario para generar energía fotovoltaica e inyectarla a la red cuesta entre 70 y 75 mil pesos. Y, según un informe del Taller Ecologista de Rosario al que tuvo acceso #IMPULSO, ese usuario ahorra un 12,79 por ciento en la facturación bimestral.
El estudio se hizo en comparación con las ciudades de Santiago de Chile y Montevideo y reveló que el mismo usuario en la capital chilena ve un ahorro de casi el 74 por ciento en su factura. El dato muestra por qué el programa todavía no alcanza niveles considerables en la ciudad y da un parámetro de qué cifras se deberían modificar para que la generación de energía fotovoltaica domiciliaria resulte estimulante y de alto impacto en la red.
Desde que se implementó la resolución 442/13, mediante la cual se habilita a los usuarios residenciales generar su propia energía y volcarla a la red integrada, apenas el uno por ciento de los hogares se sumó a la propuesta.
En cambio, la generación de energía solar para consumo en el propio hogar sí es una tendencia creciente en Rosario y la región debido a que los costos de adquisición e instalación de los equipos es inferior y realmente el usuario disminuye el consumo de energía de red de manera que reduce notablemente los costos económicos y el impacto ambiental.
Fuente: Impulsos Negocios