El avance del proyecto Central San Pedro, en la región de Los Ríos, ha abierto un debate entre los habitantes y profesionales de la región: Qué tan segura es la construcción de este embalse en una zona que se vio afectada por el famoso Riñihuazo, un aumento del volumen de agua del Lago Riñihue tras el terremoto de 1960 y que terminó inundando la ciudad de Valdivia.
«El embalse del Proyecto San Pedro es muy pequeño en comparación al volumen de agua que se acumuló con los Tacos del Riñihuazo», sostiene Colbún, empresa a cargo de su diseño y construcción.
Para Colbún, el proyecto tiene diferencias fundamentales. Estos son sus argumentos:
1.
El volumen del embalse proyectado por Central San Pedro es de 30 millones de m3, apenas un 0,5% del volumen agua evacuado en el Riñihuazo, que fue de 5.400 millones de m3.
2.
La Central es capaz de vaciar el volumen total del embalse en un día, mediante 6 compuertas del Evacuador de Crecidas de la Presa y 1 compuerta del Túnel de Desague de Fondo.
3.
En los cerros de la zona de Presa existe suelo superficial y roca basal que no se desliza (ESQUISTOS), a diferencia del sector Tacos del Riñihuazo, en que los cerros son suelos que pueden deslizar (FLUVIOLACUSTRES).
4.
La presa es de hormigón, fundada y anclada inferior y lateralmente en roca, y funcionaría como un «rompe olas» en un evento como el Riñihuazo, constituyendo una barrera física para disipar el fenómeno conocido como «golpe de agua».
5.
El embalse no aumenta la posibilidad de provocar deslizamientos en la zona de Tacos del Riñihuazo.
6.
La tecnología actual permite la detección temprana e inmediata de cualquier anomalía de regimen normal del río que comprometa la seguridad, gracias al sistema de instrumentación y estaciones satelitales previstos.
Fuente: Central San Pedro