Aunque cada día es menor el costo de usar energías renovables, en Chile las principales fuentes energéticas siguen siendo el petróleo o el carbón. Esto según datos del Ministerio de Energía, que también señala que la energía menos usada es la solar.
“Chile es el país con la mayor radiación del mundo, sin embargo recientemente comenzamos a utilizar la radiación solar en nuestro beneficio”, comenta Andrés Velásquez, Gerente de Desarrollo de EfeSolar.
Chile tiene un gran potencial para desarrollar energía solar, sobre todo en el norte del país. Y aunque en el sur la radiación es menor, es similar a la de países como Alemania que están muy avanzados en el uso de ese tipo de energías.
El sector agroalimentario es uno de los que tiene procesos productivos intensivos en la generación de emisiones de CO2, siendo ésta la paradoja que enfrenta debido a que es uno de los sectores más perjudicados por el cambio climático, producto de estas mismas emisiones.
A nivel productivo, el sector enfrenta un doble desafío para mantener su competitividad: cumplir con los estándares de sustentabilidad exigidos por los mercados de destino, bajando al mismo tiempo sus costos de producción. Es posible afrontar estos desafíos a través de una gestión y un uso eficiente de la energía utilizada en sus procesos productivos, lo que le permitiría reducir sus costos y disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero que genera.
Según un informe elaborado por Smart Energy Concepts, existe un potencial de ahorro energético de un 16% considerando diversas medidas que incluyen las de cogeneración.
Incluso a través de la experiencia se ha podido constatar que en muchos casos el potencial de ahorro alcanza hasta el 50 o 60%.
En la Región del Maule está culminando la instalación de un parque solar fotovoltaico en la Viña Miguel Torres y firmó contrato con Sodimac para instalar en 32 locales a lo largo de Chile entre Arica y Coyhaique.
La energía solar aplicada a procesos agrícolas es una fuente segura y de bajo costo para utilizarla en los sistemas de riego, de luminosidad, ventilación, fertilización, control climático, así como también para el monitoreo y control de procesos productivos y de post cosecha.
Hace un tiempo era muy caro ser “ecológico” o “empresario verde”, pero hoy es más barato no contaminar, por lo que no hay razón para seguir usando las fuentes no renovables, asegura Fernando Rebolledo, Gerente General de EfeSolar. “El modelo de negocios que nosotros ofrecemos consiste en que financiamos la totalidad de la construcción del parque fotovoltaico, la administración y operación de éste, a cambio de un contrato a largo plazo (20 a 25 años) con descuento del 10 a 15% por el uso de la energía. Este contrato además es flexible, cuando el cliente vea que el sistema funciona puede acceder a la opción de compra del parque fotovoltaico y así obtener ahorros que van desde un 40 a 60%”, asegura Fernando Rebolledo.
Fuente: La Nación.