Carlos Finat, Acera.
En Chile las cifras siguen respaldando el buen momento que la industria ERNC vive y el elevado interés de los inversionistas por estar en el mercado nacional. Con una participación de casi el 10% en la generación de energía eléctrica, y con más de 2.000 MW en construcción, las ERNC lideran las inversiones del sector, acercando cada vez más la meta del 20%.
La acelerada incorporación de ERNC en nuestra matriz es resultado de factores que podríamos calificar como estructurales y otros que corresponden a decisiones de política energética.
Primero está la gran cantidad y excelente calidad de las fuentes renovables existentes en el país y su competitivo precio, mientras que entre los factores políticos, está la aprobación de la ley “20/25” en 2014 y la ejecución de la Agenda de Energía.
El diagnóstico, las propuestas y los compromisos de la Agenda de Energía han sido acertados y adecuados para aprovechar –entre otras cosas- el potencial de las ERNC en beneficio de los consumidores regulados, permitiéndoles también competir en condiciones más parejas con las ofertas de las generadoras convencionales.
Resultado concreto de lo anterior fueron los precios de las ofertas adjudicadas a generadores ERNC en la licitación de suministro para distribuidoras de diciembre pasado, los cuales promediaron 8 USD/MWh por debajo de las ofertas de generadores convencionales. Esa diferencia implicaría un ahorro de 360 USD millones para los consumidores regulados, es decir, para las familias y la pequeña y mediana empresa del país.
En esta misma línea, hace pocos días se publicó una nueva licitación para empresas distribuidoras con inicio del suministro en 2020 y se está a la espera de la publicación de una segunda para este año, cuyo suministro se iniciaría en 2017. Éstas serán las primeras bajo la nueva ley de licitaciones que fue aprobada en enero de este año y que representa un avance hacia un marco legal y regulatorio que elimine las barreras que por años han afectado a las ERNC.
Si bien lo anterior es muy positivo para las ERNC y para los consumidores, vemos con preocupación que en los nuevos procesos de licitación, la autoridad haya limitado la cantidad de energía que puede ser cotizada en bloques horarios (que fueron integrados en las licitaciones de diciembre de 2014 y que propiciaron la participación ERNC).
Entendemos que la decisión pretende evitar que queden bloques sin adjudicar -situación que ocurrió efectivamente en la última licitación-, sin embargo, es importante señalar que los bloques no están reservados sólo para las ERNC, los generadores convencionales también pueden competir por ellos, por lo que no vemos un real beneficio a los consumidores finales con la decisión tomada.
Es así como hacemos un llamado a la Comisión Nacional de Energía para que revise esta situación y considere abrir un porcentaje mayor de energía en competencia entre generadores convencionales y renovables no convencionales.
Tal como se demostró en la pasada licitación, los beneficiados de una mayor competencia son los consumidores finales.
Carlos Finat es el Director Ejecutivo de la Asociación Chilena de Energías Renovables (Acera).
Fuente: Portal Minero