Rocksoil y Skava Consulting se reunieron con el consejero de CCHEN, Jorge Zanelli, y presentaron un informe que plantea esta alternativa que todavía está en fase de análisis.
Aunque por ahora la tecnología nuclear no es una opción para Chile -así lo plantea el informe final de Energía 2050, aunque se abre a volver a analizarlo en el futuro- la Comisión Chilena de Energía Nuclear (CCHEN) recibió una propuesta que busca reabrir el debate.
Esta vez, la propuesta es muy novedosa, pues se trata de una central nuclear subterránea, algo que aún está en etapa de análisis a nivel mundial pero que podría ser la solución para países sísmicos, como es el caso de Chile. Esto, porque contaría además con un sistema de enfriamiento que podría darle viabilidad y seguridad.
El pasado lunes, el consejero de la Comisión Chilena de Energía Nuclear (CCHEN), Jorge Zanelli, en calidad de presidente subrogante de la instancia, recibió a una comitiva de ejecutivos italianos que le presentaron un proyecto. De acuerdo con la convocatoria de la reunión, que se llevó a cabo en la sede de la CCHEN en Santiago y se extendió por una hora, participaron el gerente general de la italiana Rocksoil, Pietro Lunardi, junto con Marcos Allende Valdés y Giuseppe Lunardi, de Skava Consulting S.A.
En la reunión los ejecutivos europeos entregaron un estudio elaborado por el “I.G.N.G.C. Consorcio Integrado Geo-Ambiental, Nuclear y Geo Ingeniero: Propuesta al Gobierno de la República de Chile-Ministerio de la Energía por la dirección de una Valoración de un Proyecto por la Generación de Energía Nuclear en Chile”. El documento es de carácter reservado, y se encuentra en poder de la Comisión Chilena de Energía Nuclear (CCHEN). Sin embargo, conocedores del documento destacan las potencialidades que entregaría el desarrollo de este tipo de tecnología.
No es una idea descabellada. Sin embargo, cualquier iniciativa que contemple la instalación de una planta nuclear bajo tierra requiere un detallado estudio de mecánica de suelo, señalan quienes han tenido acceso al escrito.
Una obra de este tipo es comparable a un túnel o una línea de Metro, en términos de los estudios de ingeniería de detalle.
Una de las cualidades que explica el documento es que los costos de una planta nuclear subterránea serían similares a los de un reactor en la superficie, pero con mayor seguridad. No obstante, dichos costos son variables, porque los costos para la construcción de una planta de este tipo son variados, dependiendo de la tecnología y potencia.
Los costos
Hace algunos años, construir un reactor de 1.200MW costaba más o menos lo mismo que implicaba levantar una represa hidroeléctrica de esa misma potencia.
Hoy, en el caso de un reactor nuclear, la construcción es la cara, pero el combustible es lo barato. Por lo mismo se parece en términos de costo a la hidroelectricidad, complementa la misma fuente.
A la fecha, los países que siguen trabajando en desarrollar plantas con tecnología nuclear son China, EE.UU, Finlandia y Francia.
Todas estas nuevas plantas cuentan con una tecnología que trata de evitar un nuevo desastre de Fukushima.
Por estos días son 70 las centrales nucleares que se encuentran en plena etapa de construcción alrededor del mundo.
Fuente: Pulso